jueves, 21 de agosto de 2008

a.C - d.C.

Todas las canciones de antes siguen sonando
porque estoy hecha con ellas.
La sangre, a veces, sólo a veces, brota a su ritmo.

Las escucho en on y off, me recuerdan a mí cuando me extraño.
Me acuerdo de mi pelo lacio, negro y largo.
Recupero mi esencia y el Fructis de Garnier.

Resucito de la muerte viva algunos años después de Cristo.

lunes, 4 de agosto de 2008

Impulso

Cuando la soga anclada al esternón estira sin piedad
No puedo, no, evitar que me arrastre.
No puedo, no, resistirme.
Ese trayecto onírico donde canta Bruno Lomas.
Ese camino en espiral que me ayuda a caer en la fantasía.